jueves, 30 de julio de 2009

La flexibilidad laboral

Piden a voces mayor flexibilidad laboral. Nos dicen que servirá para crear mas empleo que ayude a hacer crecer la economía. Vamos a ver como eso de la flexibilidad laboral es una farsa montada por el gran capital para robarnos más aun.

La flexibilidad laboral dicho más sencillamente es:
  • Despido libre. Sin tutela judicial (inconstitucional)
  • Rebajar al mínimo posible la indemnización por fin de contrato y despido improcedente (que dicho sea de paso, si no existe eso de la indemnización, mejor)
  • Menores cuotas a pagar a la seguridad social
  • Eliminar el límite horario semanal de trabajo (48 horas semanales)
  • Eliminar el concepto de antigüedad
  • Como hacen en Gran Bretaña, saltarse los convenios colectivos en casos específicos (competencia desleal entre trabajadores que acepten el trabajo por menos dinero de lo que marca el convenio).
  • Y un largo etcétera.

Estas propuestas, cuanto menos son un poco obscenas viendo los desorbitados finiquitos por despido que reciben los grandes empresarios. Eso es dar ejemplo, y lo demás, tonterías.

Por supuesto, la patronal nos lo quiere vender como la panacea para acabar con la crisis económica. Hará que puedan contratar mas gente porque no tendrán que pagar tantos impuestos ni otros conceptos, pero aquí esta la trampa.

¿Quién nos asegura que ese dinero lo use para contratar más gente y no se lo metan en el bolsillo sin más? ¿Quién dice que no amenacen a los trabajadores con el despido sino se baja el salario “voluntariamente”? Por que claro, esto lo podrían hacer si tienen intención de contratar a un trabajador por menos coste.

Lo más probable es que usaran esta situación para deshacerse de los trabajadores que cobran más antigüedad, contratar a más jóvenes, y además, en menor cantidad para ahorrar más costes aun. Si se quejan, ya contrataremos a otros curritos que hay muchos en época de crisis.

Esta es la política económica que nos venden los empresarios, y algunos partidos políticos que no nombrare.

Claro que aquí nadie se salva. Otro día hablaré del impuesto del IVA, o mejor, del impuesto de los “pobres tontos” y de los representantes de los sindicatos, esas personas que dicen defendernos, pero que solo buscan no dar palo al agua.

viernes, 10 de abril de 2009

Una de Física: Viajes en el tiempo

Hace unos años empecé a estudiar la carrera de Física porque siempre me habían llamado la atención preguntas como ¿de donde venimos? ¿Hacia donde vamos? ¿Estamos solos en el universo? ¿Podemos viajar mas rápido que la luz? y ese tipo de preguntas.

Desde luego, contribuyó mi afición a la serie Stargate, que narraba las aventuras de un equipo de 4 personas, que viajaban a través de un aparato llamado “Stargate”, millones de kilómetros en cuestión de segundos.

La lección de hoy podría tratar de multitud de cosas, pero creo que de las que mas llaman la atención podría ser la cuestión de viajar en el tiempo.

¿Podemos viajar en el tiempo? ¿Y en un futuro? ¿Solo hacia el futuro, o también al pasado? Estas preguntas, llevan trayendo su miga mas de 50 años, y algunas de ellas (viajar al pasado) todavía estar por demostrar si es posible.

Por lo visto, según un tipo llamado Albert Einstein, seria posible viajar al futuro, aunque de una manera un tanto peculiar. Tendríamos que ir en una nave o similar a una velocidad muy próxima a la de la luz. El problema seria, que por lo visto no podríamos volver para contar lo que hemos visto, aunque claro, esto podría ocasionar algunos problemillas, como en la saga de Regreso al Futuro.

Pero ¿porque si se puede viajar al futuro? Por lo visto, no podemos ir más rápido que la velocidad de la luz, jamás. Es una ley de la naturaleza. Es mas, da igual como midamos esa velocidad, siempre es la misma.

Para explicar la naturaleza extraña de la luz, voy a poner un ejemplo de cómo en algunos casos no da igual como midamos la velocidad de algo. Imaginemos que vamos dentro de un tren, por ejemplo el AVE que une Madrid con Sevilla. Se nos va la “pinza” y nos ponemos a correr en la dirección que se mueve el tren (dentro del tren, claro). Para una persona que nos observe desde fuera, dirá que nos movemos a una velocidad tal que es la suma de la velocidad del tren más la velocidad a la que vamos nosotros corriendo dentro del tren (bueno, primero se preguntara si somos idiotas)

Pues este hecho, no se cumple con la luz. Da igual que midamos la luz desde dentro del tren que desde fuera, la velocidad es la misma. Y esto ocasiona cosas interesantes, porque si se diese el caso de que el tren fuese a una velocidad muy próxima a la de la luz, el tiempo pasaría más lento dentro del tren que fuera, aunque para los viajeros del mismo, no habría ningún cambio.

La gracia estaría cuando se bajasen del tren, porque “habrían viajado al futuro”, ya que ha pasado menos tiempo para ellos que para los que estaban en la vía. A este hecho se le conoce como la “Paradoja de los Gemelos”. Esta situación se da cada vez que nos montamos a un avión, pero la velocidad es tan pequeña en comparación con la de la luz que no lo notamos.

Bueno, toda esta situación se da porque, por lo visto, la velocidad de la luz es insuperable. Es mas, si el supuesto tren fuese a la velocidad de la luz (se le suele llamar c), todos los que estuviesen dentro estarían como “congelados”, o mejor, “como si hubiésemos dado al pause en la película”.

domingo, 15 de marzo de 2009

El futuro del Atletismo

Tras años de práctica deportiva, y otros tantos como entrenador, le hace a uno ver que el atletismo necesita un cambio profundo en nuestro país.

Todos los años veo pasar promesas de este deporte, y al tiempo, sin darse uno cuenta, desaparecen como si no hubiesen existido.

En una labor que no llevaría demasiado tiempo, podríamos observar los ranking de hace algunos años y anotar los primeros clasificados de las categorías mas jóvenes (infantiles, cadetes y juveniles principalmente). Tras ello, podríamos buscar dichos nombres 5 o 6 años mas adelante, y por desgracia nos encontraríamos con la desgraciada sorpresa de que no aparecería prácticamente ninguno (existen excepciones como la de Reyes Estévez, pero son minoritarias).

¿Qué ha pasado con estas grandes promesas? ¿De repente se han vuelto unos “paquetes”? ¿Por qué, siendo grandes prodigios, abandonan prematuramente el atletismo?

Me llevo haciendo estas preguntas desde que empecé a hacer atletismo hace más de 8 años, y por desgracia, son muchas las causas que llevan hacia este futuro poco alentador.

Por todos es conocido el papel que tuvo el atletismo español en las pasadas olimpiadas de Pekín. No me meteré en que no hayamos conseguido ninguna medalla, pero si en que las mejores posiciones fueron de atletas que llevan en la elite muchos años. Y digo yo, ¿Dónde están las nuevas promesas del atletismo?

La cultura del esfuerzo esta cada vez más denostada. Ello hace que los jóvenes sean cada vez menos proclives a la práctica deportiva. Por ello, no debemos responder con los mismos métodos de siempre, caducos y que sin duda, ha quedado demostrado que no sirven para sacar grandes campeones.

Seguimos viendo en las pistas, entrenadores que priman resultados a corto plazo, en lugar de construir atletas para el día de mañana. No se prima la técnica, la velocidad, la coordinación, la flexibilidad y todas aquellas facetas y cualidades físicas que, por desgracia, solo son mejorables significativamente en edades tempranas.

Primamos otras cualidades, como el fondo, que sin embargo, si son mejorables mucho mas adelante (véase que la edad media de los campeones en la Marathon esta por encima de los 30 años), y donde, a causa del sobreentrenamiento de esta cualidad, “quemamos” al atleta, y además, perdemos un precioso tiempo para favorecer las otras cualidades anteriormente citadas, tan necesarias para la mejora futura.

Todo lo anterior desemboca al fracaso en la practica deportiva porque, ¿que pasa cuando un atleta que ha ganado durante muchos años, de repente, deja de ganar? ¿Qué pasa cuando deja de asimilar el entrenamiento porque ha realizado una planificación de adulto?

Pues viene la decepción, la perdida de las verdaderas razones por la que se practica el atletismo y por ultimo, el abandono de nuestro deporte.

Hay muchas mas razones del abandono, por supuesto que si, pero ninguna de estas son la causa de la perdida en el camino de los grandes campeones de las categorías menores.

Los entrenadores de categorías menores debemos primar por una evolución atlética consecuente con el futuro, donde se entrenen y potencien aquellas capacidades que no podremos mejorar cuando seamos adultos (velocidad gestual, coordinación general, flexibilidad, equilibrio, y gracias a todo ello, la técnica).