viernes, 10 de abril de 2009

Una de Física: Viajes en el tiempo

Hace unos años empecé a estudiar la carrera de Física porque siempre me habían llamado la atención preguntas como ¿de donde venimos? ¿Hacia donde vamos? ¿Estamos solos en el universo? ¿Podemos viajar mas rápido que la luz? y ese tipo de preguntas.

Desde luego, contribuyó mi afición a la serie Stargate, que narraba las aventuras de un equipo de 4 personas, que viajaban a través de un aparato llamado “Stargate”, millones de kilómetros en cuestión de segundos.

La lección de hoy podría tratar de multitud de cosas, pero creo que de las que mas llaman la atención podría ser la cuestión de viajar en el tiempo.

¿Podemos viajar en el tiempo? ¿Y en un futuro? ¿Solo hacia el futuro, o también al pasado? Estas preguntas, llevan trayendo su miga mas de 50 años, y algunas de ellas (viajar al pasado) todavía estar por demostrar si es posible.

Por lo visto, según un tipo llamado Albert Einstein, seria posible viajar al futuro, aunque de una manera un tanto peculiar. Tendríamos que ir en una nave o similar a una velocidad muy próxima a la de la luz. El problema seria, que por lo visto no podríamos volver para contar lo que hemos visto, aunque claro, esto podría ocasionar algunos problemillas, como en la saga de Regreso al Futuro.

Pero ¿porque si se puede viajar al futuro? Por lo visto, no podemos ir más rápido que la velocidad de la luz, jamás. Es una ley de la naturaleza. Es mas, da igual como midamos esa velocidad, siempre es la misma.

Para explicar la naturaleza extraña de la luz, voy a poner un ejemplo de cómo en algunos casos no da igual como midamos la velocidad de algo. Imaginemos que vamos dentro de un tren, por ejemplo el AVE que une Madrid con Sevilla. Se nos va la “pinza” y nos ponemos a correr en la dirección que se mueve el tren (dentro del tren, claro). Para una persona que nos observe desde fuera, dirá que nos movemos a una velocidad tal que es la suma de la velocidad del tren más la velocidad a la que vamos nosotros corriendo dentro del tren (bueno, primero se preguntara si somos idiotas)

Pues este hecho, no se cumple con la luz. Da igual que midamos la luz desde dentro del tren que desde fuera, la velocidad es la misma. Y esto ocasiona cosas interesantes, porque si se diese el caso de que el tren fuese a una velocidad muy próxima a la de la luz, el tiempo pasaría más lento dentro del tren que fuera, aunque para los viajeros del mismo, no habría ningún cambio.

La gracia estaría cuando se bajasen del tren, porque “habrían viajado al futuro”, ya que ha pasado menos tiempo para ellos que para los que estaban en la vía. A este hecho se le conoce como la “Paradoja de los Gemelos”. Esta situación se da cada vez que nos montamos a un avión, pero la velocidad es tan pequeña en comparación con la de la luz que no lo notamos.

Bueno, toda esta situación se da porque, por lo visto, la velocidad de la luz es insuperable. Es mas, si el supuesto tren fuese a la velocidad de la luz (se le suele llamar c), todos los que estuviesen dentro estarían como “congelados”, o mejor, “como si hubiésemos dado al pause en la película”.